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Archive for 3 de julio de 2007

Una de las muchas cosas que tengo ganas de hacer últimamente es fumar en pipa.

Quienes vengan leyendo este blog desde hace un tiempo sabrán también reconocer en que eso es también una de mis ambiciones desde niño, enfatizada ahora con eso de que por si acaso (y para tratar de ayudar a que mi organismo se porte bien) me encuentro cuidando mi dieta, tomando un te horrible, ingiriendo mucha menos grasa y –por consiguiente- sintiendo mucho menos placer al alimentarme.

Y en algún lugar tengo que conseguir ese placer egoísta: descartada ha quedado la Playstation 3, que cuesta lo mismo que tres motos juntas. Descartado ha quedado aquello de formar un escuadrón de la muerte y arrojar NAPALM sobre las villas, porque me dijeron que esa sería una actitud “poco progre” y estaría mal vista considerando la escasez de combustibles. Ese “algún lugar” que necesito –estoy seguro- es una pipa.

Un vecino mío, muerto hace algunos años, solía sacar una vieja pipa y fumar su tabaco con aroma a chocolate mientras regaba las plantas, y créanme: el barrio no es lo mismo sin ese aroma.

Ahora bien, no poseo una pipa. Tendría que comprar una, y quiero una pipa clásica. Dicen que para empezar es preferible una recta y no tan compleja, pero se me hace que los mismos que dicen eso son los que creen que primero hay que “practicar ennoviándose con las feas”, para estar listo cuando lleguen las lindas. Tampoco quiero una pipa de las que venden en esas tiendas provistas de artículos rastafarios o semejantes, porque para mí esas pipas son “pipas de faloperito”, muy baratas y prácticamente descartables, pero menos honorables que practicar sexo oral con tu carcelero a fin de que éste te convide un cigarrillo. Yo quiero una pipa de esas que parecen un cacho de intestino grueso de Pinocho, todas curvadas y llenas de personalidad.

Ahora bien, mucho me temo que –hablando en serio- no podría yo fumar en pipa jamás debido a que en mi casa nadie fuma y de que no me gusta ningún humo que no sea el de mi chimenea, saliendo negro y presuroso rumbo a la ropa colgada y recién lavada de mis vecinos, poco comprensivos ellos. Pensé en comprar algo de tabaco y tirarlo sobre el hogar, pero no voy a andar dándole de fumar gratis a nadie. Así que no. La parte más difícil sería el convencer a mi futura esposa de que voy a agarrar un vicio que ni siquiera a mí me gusta. Y como ella tiene el control de prácticamente todas las situaciones de esta índole, terminaré fumando nada; una feta arrollada de jamón cocido sin la partecita de la grasa, a lo sumo. Pero de sueños vive el hombre, y la posibilidad de fantasearme sofisticado (y masculino, y varonil, y todo eso) ronda mi cerebelo sin pedir permiso.

Lo que necesito entonces es que ustedes enarbolen los mejores argumentos que tengan a mano a la hora de desalentarme. Tengan en cuenta que la batalla es dura, ya que en caso de fumar pipa yo calculo que al llegar a los setenta años me vería mas o menos así, como el tipo de esta foto.

No sé quien es o como se llama, pero debe ser un semi-Dios europeo.

Y no hay cosas mejores. Piénsenlo bien. Van a tener que esforzarse.

Yo, por mi parte, voy a exponer entonces los argumentos a favor. Los PRO, sin tener nada que ver ese xeneizísimo explotador de seres humanos conocido como Mauricio “Si creen que ahora soy adinerado véanme dentro de tres años y cáiganse de culo” Macri. O la tullidita esa que cuando baila en la silla de ruedas me recuerda a Johnny 5.



Entonces, yo voy a empezar a fumar porque:

1- De algo hay que morirse.
2- El tabaco de pipa es mucho más saludable que cualquier cigarrillo de papel y nicotina.
3- Si no empiezo ahora, de viejo seguramente no voy a disfrutarlo tanto.
4- Voy a parecer un campeón si se me compara con cualquier infeliz que saque el Malboro Box del bolsillo de la camisa.
5- Probablemente me sienta mucho más viril. Ya lo dije.
6- Seguramente me sienta mucho más atractivo.
7- Voy a verme titánico ante los niños que pasen cerca de mí.
8- Probablemente se me apode “Pipa”.
9- La viuda de mi vecino se emocionaría al sentir el olor y como agradecimiento me regalaría frascos de la mermelada casera que suele hacer.
10- Eventualmente llegará el día en el que responda cosas como: “No, pibe, a las pipas de este tipo de nogal las tenés que curar a 68 grados, no a 69…ajajajaja… ¡estás verde, eh! Jajajajaja…”, o algo parecido y que suene a que poseo conocimientos específicos propios de un erudito en algo más que los videojuegos.
11- No voy a estar fumando constantemente sino que lo voy a hacer mientras lea o escriba cosas más interesantes que las de ahora.
12- El fumar en pipa me abriría las puertas al mundo de las bebidas alcohólicas de viejo (grapa, ginebra, brandy) y las bebidas alcohólicas te hacen más hombre todavía.
13- Sherlock Colmes fumaba en pipa.
14- La gente me va a identificar como “el señor de la pipa”.

Y por favor, no traten de decir que fumar para verse espectacular es cosa de inmaduros. Busquen algo mejor. Tengo muy en claro que se comienza a fumar –directa o indirectamente- sólo por inmadurez adolescente e irrefrenables ganas de que a uno lo miren, o pertenecer a un grupo de enfisematosos llenos de estilo.

No imagino otra razón para andar chupando humo.

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