Todos están enloquecidos, se realizaron las movilizaciones, se adhirieron los gremios, la UBA debe estar imprimiendo afiches a más no poder y las remeras con la leyenda “las tizas no se manchan con sangre” ya están saliendo como pan caliente. “Carlos Fuentealba* (presente), ahora (y siempre)”. Pero, vamos, era evidente que tarde o temprano iba a suceder. En la provincia de Neuquén, fuerzas policiales le estrellaron una granada de gas en la cabeza a un delegado gremial (y docente recibido desde hace poco) que se hallaba dentro de su automóvil durante un corte de ruta, piqueteando como lo venía haciendo desde su adolescencia. Tanto piquete, tanta manifestación, tanta moda de cortar calles… iba a pasar. El pobre era número puesto.
Las razones del reclamo por parte de los docentes neuquinos eran justas: un aumento de sueldo. Los docentes ganan una miseria y en el interior eso se nota todavía más. Más allá de eso, sería hipócrita creer que -entre los que forman parte del movimiento y las protestas- no hay ninguno que esté pensando que la muerte de este profesor vino de perillas. Necesitaban un mártir, que llegó, lamentablemente. No anduvieron los subtes, los trenes ni los colectivos; creo que tampoco los vuelos. Hay quienes aprovecharon para no trabajar, y quienes sinceramente se asquearon ante la situación. Las marchas: multitudinarias. Otros se alegraron y lo vieron como un “a ver si ahora se dejan de joder”. También están aquellos a los que no les va ni les viene y viven ajenos a todas estas cosas.
La verdad es que yo no sabría decir donde me encuentro. Salí de casa con algo más de tiempo extra, por si acaso. Estoy bastante insensibilizado ante la muerte de cualquiera, de un tiempo a esta parte, por lo que no grito ni digo: “qué barbaridad”, ni nada de eso, y a pesar de que el hecho me parece horrible, también me parecía (reitero) número puesto. Sí puedo decir que hubiera preferido que fuese otro el muerto, qué se yo, alguno de esos delincuentes encapuchados que se juntan a quemar, romper cosas y saquear sin hacerse responsables de sus actos. El monarca dictador que llevo dentro incluso sacrificaría decenas de esos ejemplares a cambio de un docente, y miles a cambio de uno bueno, aunque desconozco las verdaderas capacidades del occiso de turno. Podríamos decir que soy testigo del peligroso enfrentamiento entre el derecho legítimo de la protesta con el necesario orden para vivir en democracia. ¿Qué habría pasado si un vehículo cualquiera hubiese decidido pasar sí o sí a través de alguno de estos piquetes? ¿Se puede pretender normalidad cuando la república no puede poner orden en las calles (ni siquiera dentro de los límites de la ley, no siendo este el caso) sin ser considerada un monstruo represor? ¿No es este descontrol lo que se obtiene por no haber hecho algo antes?
Lo de nuestro presidente (el señor Nestor Kirchner) fue electoralista e impresentable, como siempre. Sigue sin comprometerse o aparecer en público a menos que le aseguren que va a ser vivado y aplaudido. ¿Incidentes? Mutis por el foro y que quien se tenga que inmolar, se inmole. Varios días después, apareció haciendo leña del árbol caído y aprovechó el ruido para aprobar el aumento del gas natural (15%). Sin embargo, lo que a mí más me llamó la atención fue la reacción del gobernador de la provincia de Neuquén, Jorge Sobisch. El inmolado. El árbol caído. Este muchachote no sólo mandó a reprimir con violencia a los docentes causando accidentalmente la trágica muerte de Fuentealba, sino que una vez desencadenado el despelote, mantuvo su postura y dijo que lo volvería a hacer. Y en esto último estoy muy de acuerdo, porque no le quedaba otra. Está políticamente fulminado. No puede, a esta altura del partido, hacer otra cosa más que redoblar la apuesta y mandar el arquero a cabecear el tiro de esquina, aunque la pelota esté hecha de alfileres.
Creo que las razones de la represión en primer lugar fueron evidentes: si los dejaba quedarse corría el riesgo de tener su propio “Gualeguaychú” en pleno circuito turístico, comenzando justamente durante las Pascuas. Pero lo que creo que piensa hacer ahora es provocar nuevos incidentes (Quebracho no se va a hacer rogar) y lograr que los manifestantes agredan a los policías. En una de esas, matando a unos cuantos efectivos. Podría incluso contratar a infiltrados y estrellar bombas incendiarias (del tipo casero) contra un patrullero cargado de agentes.
Es lo que yo haría. Nuestros policías no saben reprimir sin faltar a la ley. El pueblo no sabe protestar sin faltar a la ley. Ya no hay forma de resolver honorablemente todo este asunto. Mis respetos a los deudos.
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*Me preocupa que el cantante de A77aque pueda haber tenido algún arranque de inspiración y esté escribiendo en estos momentos algo que incluya cosas como “Fuente de la indignación”, “Tizas que enseñan al alba” o cosas así.
*Sería una picardía que no se hiciese pronto una película referida al incidente. Fuentealba era igualito a Pepe Monje.
Coincido plenamente con todo lo aquí expresado.
Un detalle, hace unos meses un remisero intentó cruzar un piquete con una señora que llegaba tarde a la cita con el oncologo o algo por el estilo. Le rompieron los vidrios, le golpearon al remisero, le patearon el auto, lo putearon, y como si fuera poco, los mismos encapuchados golpeadores salieron en camara diciendo que (el remisero) era un violento, la señora se tiró del vehiculo y seguramente llego tarde al Dr. y hasta habrá perdido el turno.
Este asunto me huele tan feo como la emboscada piquetera (a la policia) en el puente pueyrredón que se cobró a kosteki y santillan.
Yo estuve ahi y presencié como los piqueteros emboscaron a los policias mientras éstos (independientemente de su prontuario o su posterior actuación) solo pedían que aflojaran un poco.
Lo veo como una suma de efectos, epoca electora, posibilidad de oposición al oficialismo, desborde social, todo el pueblo podrido con todos los demás etc.
Saludis!
PD: La revista National Geographic era del mes de enero del 2006. :P
La vi en un kiosko de Lavalle y Suipacha en el centro. Saludis!
Si no es Ciro Pertussi, siempre se podrá contar con León Gieco. Despreocúpese. Ah, el aumento es del 14%, así que deje de difamar a nuestro presidente.
Que no haya forma honorable… los políticos que nos hemos estado permitiendo son gente que carece de límites, escrúpulos y vergüenza. Esa condición moral sienta las bases del juego para todos.
No voy a ir más allá porque tengo la cabeza agotada de estar lidiando con gente sin escrúpulos, límites ni vergüenza. Le dejo un abrazo.
shhhh sr mantis, todo esto que usted revela es un secreto a voces. Aparte, yendo un poco mas atras en el tiempo, la policia siempre se encargo de darles martires a los movimientos populares, sin ir mas lejos, Kostecki y Santillan, o alguno de los caidos durante el 19 y 20 de diciembre de 2001.
Por otro lado, la policia no perece ante las manos de los manifestantes, aunque el propio rey del mundo necesite un cuerpo policíaco lleno de balas, a lo sumo son heridos de gravedad, y se la pasan de vacaciones en un hospital durante un par de semanas, son visitados por compañeros, el gobernador, y por supuesto, canal 9.
Ahora, seamos honestos, creo que el punto de la cuestión lo marca usted: la policia no sabe reprimir y nosotros no sabemos protestar, y asi, pasaran los años, los martires seran miles, y todo seguira como siempre.
Con respecto a lo otro, para mi es Leon Gieco y la cancion se va a llamar «El hombre de la tiza sincera».
saludos
El Turi: ¿Y que hacía usted ahí? ¡Corra, que llueven sapos!
Eli: No lo sé… caca vez estoy más de acuerdo con eso de «pregúntate lo que puedes hacer tú por tu país, y no lo que tu país puede hacer por tí». Aprovecharse de que «los milicos son todos asesinos y torturadores» para hacer lo que venga en gana me parece una vileza que deteriora lo poco que queda sano. Si es que queda algo.
Gonchi: La policía no perece porque en cuanto los manifestantes se empiezan a poner locos, ellos se ponen locos y 1/2. Pero quedan tuertos, rengos, desfigurados, internados durante meses, con secuelas de por vida… y la diferencia entre eso y lo de Fuentealba es la puntería y la desgracia, nada más.
A veces parece que uno se olvida de que los policías son empleaduchos también, con jefes, familia, castigos, sanciones y sueldos miserables.
Mantis querido:
En el último comentario le crecieron un poco los bigotes y la visera de la gorra…
Es cierto, todos somos, salvo los que mandan, empleados de alguien, pero nos diferencia el libre albedrío de cumplir o no con órdenes humillantes o asesinas. El tema es que los pobres tipos que cumplen las órdenes en la policía son analfabetos, con portación de armas, en muchos casos con prontuarios, como el que asesinó a Fuentealba, y que no tienen ningún escrúpulo por hacer cumplir las órdenes más aberrantes. Por sus sueldos de hambre se convierten en resentidos coimeros gatillo fácil.
La culpa es de ellos? No enteramente, la culpa es de un Estado asesino que mata de hambre, mata de indiferencia, mata por mano de estos pobres tipos.
My two cents…
Más que la visera, en realidad es un comentario demasiado cristiano: A ojod de Dios somos todos iguales. Creo que las muertes son todas muertes cuando se pelean entre borregos. Quiero decir: una muerte de un policía durante los incidentes me habría parecido igualmente horrible.
¿Alguien se acuerda de cuando Kirchner era gobernador y cagaba a palo a los maestros en Santa Cruz? Sobisch no es mas ni menos feudal que él. ¿Acaso en Santa Cruz no hay escuelas? ¿Acaso no hay bravucones gremiales y maestros oportunistas que jamás pisaron un aula para enseñar, en esas protestas? Los maestros que no se adhieren a los paros son amenazados. Amenazan con quemar escuelas. ¿Eso es ser docente?
De a ratos esto tiene un caracter tan mafioso como demencial. No sé qué es peor. Hugo Moyano o Yasky no tienen prontuario nomás porque no se los investiga…
No iba a comentar nada porque este tipo de post no son los que más me gustan de Damos pena. Sólo una cosa: hay una desproporción importante entre el delito «cortar la calle» y el castigo «muerte». En un estado de cosas normal, al que corta la calle cometiendo un ilícito (no sé si este era el caso) deberían meterlo preso o aplicarle la dispuesto en el código penal. Matarlo no. Y que el policía esté en la situación que está, no lo absuelve, es más, el policía debe actuar con mayor responsabilidad que el resto de la sociedad por su posición. Si su situación es mala, debe reclamar para que le mejoren las condiciones de trabajo. Matar a tipos que reclaman por la mismas carencias que ellos tienen, no parece razonable y parece más bien una meada fuera del tarro.
Pensar que la muerte le sirve a los que reclaman, (aunque tenga algo de verdad con grupos como Quebracho), es suponer políticos ingenuos que mandan a matar aun sabiendo que eso va a empeorar todo, poniendo en riesgo incluso sus gallinitas de oro (la muerte de los piqueteros en Avellaneda apuró la salida de Duhalde) Y en el otro extremo, también podríamos pensar que los políticos fomentan las protestas violentas para fortalecer el discurso de los que piden que la policía salga a meter palo y de esa manera legitimizar su accionar. También le sirve a los políticos opositores que ven una posibilidad de acceder al poder, y a otros políticos (por ejemplo a Kirchner, que distrae por unos días la atención de la opinión pública).
Al que seguro no le sirvió de nada es al docente que murió.
No creo que Sobisch haya mandado a matar, pero sí creo que el muerto se convirtió en una .45 a la hora de negociar cualquier cosa de aquí en más. Tampoco creo que lo haya hecho Kirchner, porque también se pedía su cabeza y por eso tuvo que hacer «la gran de la Rua», esfumándose de la rosada, saliendo para Olivos. Luego la utilizó como pudo, pero se le debe haber fruncido debido a que este tipo de cosas son las que lo hacen tener que lidiar con los sindicatos mafiosos y demás impresentables. Porque a los gremios y semejantes esto les viene mejor que mejor.
Acerca de la diferencia entre los castigos a los delitos «cortar la calle» y «matar», es lo que hace que estemos en este lío. Mientras no sea «matar», vale que se haga cualquier, pero re-cualquier cosa, hasta que alguien se acuerda de que no es así. Un corte de calles no es solo un corte de calles, y no tiene nada de pacífico cuando está siendo llevado a cabo por barrabravas. Por eso se termina matando a alguien: porque no se hizo algo antes. Insisto: está primando el derecho a la protesta demencial por sobre el mínimo orden necesario para vivir en democracia. Docentes que no actuan como docentes, policías que no actuan como policías. Vale todo.
Si vale todo, es anarquía, y si todo está mal, vuelve el golpe de estado, la revolución y el sálvese quien pueda.
yo estoy de acuerdo con vos Mantis… me parece que muchas veces a los piqueteros se los pone en papel de mártires, cuando en realidad, muchas veces se mezclan los tantos…
Me parece bien que las personas se expresen, pero se olvidan que donde terminan sus derechos, comienzan los de los demas, aunque suene a frase hecha, y hay mucha gente que perdio el presentismo, o que no pudo llegar a sus tareas diarias o a otros compromisos (como la señora que iba al oncologo) por culpa de que cortan las calles. Y los muy cobardes se tapan la cara para que no los reconozcan!
Cuando nos vamos a dar cuenta de que salir a romper todo no es el camino mas indicado….
Respecto a la policia, me pongo un poco en el lugar y, honestamente si me viene a revolear un palazo o piedras, yo me defendería.
Saludos!
Estoy totalmente de acuerdo con tus opiniones, una vez mas.
Todo esto no hace mas que poner en evidencia el grado superlativo de la hipocresía reinante hoy en día en este país.
La muerte del maestro ese es un hecho desgraciado y lamentable, pero yo me pregunto ¿Y si el muerto hubiera sido un policía? ¿Hubiera habido marchas en repudio, o hubieran mostrado a Hebe de Bonafini festejando?
Además, prácticamente TODOS los dias nos enteramos de que matan a algún jubilado, o laburante, o policía, para robarle, o en un enfrentamiento con delincuentes, o por resistirse a pibes chorros
pasados de falopa ¿Esas muertes no valen nada? Porque no vi a ninguna de estas «agrupaciones» tan defensoras de los derechos humanos protestando por eso, ni reclamando justicia, ni mostrándose compungidos delante de las cámaras de televisión.
En cuanto a la parte política del asunto hay que preguntarse ¿Quien se beneficia con todo esto? ¿Realmente alguien puede pensar que Sobisch va a mandar a liquidar a un maestro de cara a una elección presidencial en la cual se postula? A mi me parece que no.
La actitud miserable y ventajera del hipocrita de Kirchner no me sorprende en lo mas mínimo. Es absolutamente esperable de alguien como él. ¿Y ahora quien se acuerda que todo esto empezó en Santa Cruz?.
Por lo único que el muerto no fue santacruceño es porque en Neuquén pasó primero (casualmente, claro … fue la providencia).
No se. Todo esto a mi me huele mal, muy mal.
Acá desde hace tiempo que nos están vendiendo pescado podrido, y nadie parece darse cuenta.
Bajen el cinismo uno o dos niveles. Renegado: la razón por la cual las agrupaciones de derechos humanos no se quejan por cada muerte individual a manos de un chorro (porque quejarse se quejan, y bastante seguido) es simple: una cosa es que te mate un chorro, y otra es que te mate el estado mismo que se suponia te tiene que defender. En ambos casos es una muerte, pero la organizaciones no tienen más para quejarse que aumentar la seguridad o algo así en un caso, y en el otro se quejan ante el mismo estado que los mata.
Decís:
«¿Y si el muerto hubiera sido un policía? ¿Hubiera habido marchas en repudio, o hubieran mostrado a Hebe de Bonafini festejando?»
Yo también admiro la hiperbola como recurso literario, pero esto es demasiado. ¿Realmente te pensas que la gente va a alegrarse de la muerte de un policía? Por otro lado, no es cierto que los muertos no son policias por una cuestion de puntería: un grupo de docentes jamás va a matar un policía, por lo menos no en un futuro cercano.
Renegado: Si, bueno, igualmente hay que saber diferenciar las muertes del estado de las otras. Es cierto que se supone que el Estado debe poner orden. A lo que voy es a que estos desmanes y desgracias suceden porque no se puede poner un poquito de orden sin que haya escandalete. Y si pasa en Santa Cruz, no nos vamos a enterar.
Niv: Como verá, arriba le dí la razón. Ahora bien, los docentes no matan policías, pero no lo hacen de medidos que son, nomás. Pero la única razón por la cual no agredieron a quienes querían cruzar la ruta, fue porque esas personas no quisieron salir lastimadas. Es ingenuo creer que la marcha docente es únicamente una batalla exclusiva de maestras y maestros que salen del aula, se sacuden el polvo de tiza y se agarran de las manos cortando la calle.
Por otro lado: no supe de docentes que salieran a decir: «no queremos que la gente de otras facciones políticas se cuelgue de nuestro reclamo» , y la gente de Quebracho es combativa casi exclusivamente, por no decir que son patoteros encapuchados a sueldo. Ni hablar de Moyano y sus acólitos.
Kosteki y Santillán, en paz descansen, no eran docentes. Si yo quisiera pasar a toda costa a través de un corte hecho por sus colegas, ¿no me darían acaso una paliza? ¿Está bien eso? ¿Y si me muero por las heridas? La diferencia está en que los manifestantes atacan amparados en que no se les puede tocar un pelo, cuando ellos sí pueden agredir. Y eso termina desencadenando estas muertes tan desgraciadas. Siento mucha pena por los hijos de este tipo.
Por último: Creer que un grupo de docentes no es capaz de matar a un policía, es peligroso. Todos somos capaces de matar a todos, llegado el caso (que -por las dudas- aclaro, no es este). Todos, todos, todos…
En una de esas termina siendo verdad eso de que Madonna Quiroz es una palomita. Al fin y al cabo, no mató a nadie.
En Santa Cruz pasó y no hace mucho. En la localidad de Las Heras mataron a un policía y eso derivó en la caída del gobernador Acevedo.
Venia de hacer un tramite en la capital y crucé el puente chico a pie. me encontré con ese espectáculo. cuando llegué a mi casa, me enteré lo de los asesinatos y eso.
El tema fundamental, es que siempre hay un roto para un descosido, para cada cosa que pasa en la Argentina nuestra de hoy, hay alguien siempre que va a salir a cortar las calles con palos piedras, y encapuchados, reclamando «algo», llámese plan social, aguinaldo social, canasta navideña gratuita, aumento de salario y reduccion de la jornada laboral, aumento del boleto de colectivo, etc.
Todo este tema es muy peligroso y realmente huele muy mal. Mi pésame a la familia del docente caído.
Saludis!
Chester: Si, estaba buscando algo sobre eso, del año pasado. Los piqueteros directamente se mandaron a atacar, siendo los policías los encargados de «resistir» a los señores sindicalistas y sus protegidos.
Las dos partes deben estar haciendo las cosas mal, si la única forma de represión que funciona es la represión a muerte debido a que la policía no puede meter preso a quien viola la ley.
Pero (recontrainsisto) vale todo, todo, todo. ¡A matar, que somos muchos!
-Mire, Turienzo, mire como bailan…
-Sí, Negro, seguro. A mi también me resultan hasta simpáticos los tres monitos que salieron a la pista.
-No me gorilée, Morocho, con eso de que la culpa no es del bailarín sino del que toca la flauta…
… todo lo que dijo y que además la minivacaciones de Semana Santa se alargaron… que si no, no se adhería «todo el país» como lo hicieron.
Yo lo veo como puedo.
Besos
«y mandar el arquero a cabecear el tiro de esquina, aunque la pelota esté hecha de alfileres»
Lo unico que el falta a Sobitch es mandar a Sessa en este momento.
La izquierda siemrpe busca martires porque movilizan a la gilada, y no se quejan por el derecho de autor de remeras y consignas que sacan, el merchandaising proletario.
La derecha aprovecha el «derecho termina donde empiesa el del otro» para dar duro y parejo. Lo de siempre.
COnrespecto a lo ultimo, estoy de aceurdo con eli. A mantis ya no le hago caso de lo que diga musicalmente, la ultima vez tiro mucho sin saber sobre cosas personales, muy amarillo-rialesco. Aparte del pecado de escuchar japonecitos, la musica japonesa no existe ellos solo ahcen videojuegos o espadas samurais.Diganme una cancion japonesa,…..Shimauta, la canta Casero, caso cerrado.
La pelicula no solo la protagoniza Pepe Monje sino la dirige Caetano, y la aprticipacion especial de Miguel Bonazzo.
Y Juan Palomino qué papel hace? Porque no van a hacer cine combativo sin Juan Palomino, verdad?
Complicado…
Cuentenme cuando paramos la pelota con todo esto…
Ok, ya lo se; tengo la culpa yo
La lucha por el poder cada vez es mas explicita… ¿Y eso me molesta?.
Los delirios de impunidad a niveles insospechados.
Donde esta mi espada…
Amperio: Al Turienzo voy a cobrarle boleto, porque viene a mirar nomás. La culpa no es del bailarín ni del que toca la flauta, la culpa es de D´Arezzo, que le puso nombre a las notas.
Caliope: Qué se yo… a mí me tocó laburar, como si nada. Y no fui el único.
Neosatan: Qué grande Sessa… y no me venga con ese gordo atorrante, que todavía está levantándola con pala el muy maldito. Shimauta es el oportunismo y la inteligencia en su máxima expresión.
Eli: Palomino hace de Franco Macri.
El idiota: Acá, el único poderoso es ese que nos cuida a todos sin distinción, y sufre con nuestras acciones. Él nos ama. Su nombre es Optimus Prime.
cuento con el privilegio (si se puede decir) que ese dia me encontraba sin trabajar x mi dia de franco, no pude entender como los noticieros y los diarios se endulzaban con semejante tema, era constantemente pasar en primerisimo primer plano la parte donde el maestro estaba tirado sangrando o la filmacion «infraganti» de como exploto la bomba
no se…me resulta repugnante como se jugo con lo morbo, pero aka en argentina es todo asi
nuevamente teniendo blog nuevo amigo! cuando kiera pase
«La diferencia está en que los manifestantes atacan amparados en que no se les puede tocar un pelo, cuando ellos sí pueden agredir.»
Esto es cierto, pero no me consta que
«Si yo quisiera pasar a toda costa a través de un corte hecho por sus colegas, ¿no me darían acaso una paliza?»
sea cierto en esa manifestacion de docentes en particular, o para ser precisos en cualquier manifestacion de docentes. Si no es el caso y efectivamente me equivoco, avisen.
Dicho eso, si el muerto no era un maestro sino un tipo cualquiera, hubiera habido tanto quilombo? La verdad que me parece que no.
La orden no fue matar sino reprimir. Pero quien ordena represión debe hacerse cargo, al menos políticamente, de lo que hacen sus subordinados. Por más que el turro que disparó lo haya hecho de imbécil nada más, sin consentimiento de nadie.
Igual, políticamente, como que a algunos le vino de perillas…
Nanus: A más morbo, mas mártir. Alguno habría preferido no filmar, mas allá de quedarse sin evidencia.
Niv: Creo que los días en que sólo los docentes manifestaban no son estos. Si se armase una nueva carpa blanca, no habría en ella más que un puñado de maestros, siendo el resto gremialistas y quebrachistas.
El Guz. Si, estamos de acuerdo: hace mucho que la orden no es matar. Sería interesante. Como en las películas en las que hay una mina secuestrada. Lo que me parece una macana es que a Sobisch se lo encadene por algo que Kirchner siempre hizo en su provincia. Digo, es como ser selectivo entre los males.
Saludos a todos.
Canción de músico cordobés a Carlos Fuentealba
PERMISO PARA HABLAR
(Fernando Rahe, abril de 2007)
EL ALBA NO DIO SU PRESAGIO
LA FUENTE SE QUEBRARÍA AL FIN
OTRA LECCIÓN, LEJOS DEL PIZARRÓN
UN MIÉRCOLES 4 DE ABRIL
LOS PROTAGONISTAS DE ESTA HISTORIA
SON MÁS DE LOS QUE HAS DE PENSAR
EN UN LUGAR DONDE NO SE PUEDE HABLAR
LAS VICTIMAS SOMOS TODOS EN VERDAD
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
PERO LA SANGRE SE VA
EL VIENTO RESUENA EN ESTALLIDOS
Y LLEVA EL MENSAJE FATAL
SILENCIO DESPUÉS, PERDIMOS OTRA VEZ
NADA JUSTIFICA ESTE FINAL
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
PERO LA SANGRE SE VA
VOCES QUE PREDICAN LO QUE ES JUSTO
RAZONES QUE SE HACEN ESCUCHAR
NO DEBEN CALLAR, NO DEBEN CALLAR
EN HONOR DE AQUELLOS QUE NO ESTÁN
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
LAS BALAS NO MATAN PALABRAS
PERO LA SANGRE SE VA
Jajajaja… ay, Dios mío. La ciudadanía canadiense, por favor.
Tienes tres lunas para pedirme perdón antes de que tu ofensa haga hervir mi sangre y ya no pueda refrenar la loca furia que me haces sentir. Y te aseguro que lo último que deseas ver y sentir en tu vida es mi ira desenfrenada.